Derechos quebrantados de los niños y niñas de la Cañada Real
9 de octubre de 2020: La Cañada Real sufre un corte de luz, se interrumpe el suministro eléctrico por parte de la compañía eléctrica; el aumento del consumo eléctrico por encima de la potencia que puede soportar el cableado hace que salten los plomos.
Para los que aún no hayan oído hablar de él -cosa difícil a día de hoy- la Cañada Real es un barrio a tan solo 13 kilómetros del centro de Madrid que, entre otras cosas, es reflejo del abandono por parte de las administraciones y de la sociedad de los colectivos más vulnerables. Es cierto que en 1 kilómetro y medio -los sectores V y VI- de los 16 a lo largo de los que se extiende toda la Cañada, se encuentra el mayor mercado de droga de España, y que ello es causa directa de la sobrecarga de electricidad (por el mantenimiento de las plantaciones) y del corte del suministro. Pero ni eso puede justificar el que las personas que viven allí (en teoría, sujetos de derechos como el resto de la población madrileña, y en su inmensa mayoría con el único delito de ser víctimas de los circuitos de la pobreza y la exclusión) no puedan acceder a lo más básico para vivir con dignidad.
13 de marzo de 2021: La Cañada Real continúa sin luz. Aproximadamente más de 1200 menores viven sin luz , menores escolarizados en Centros de Villa de Vallecas, menores que se ven obligados a seguir con sus estudios en inferioridad de condiciones que el resto de sus compañeros/as y a los que se les va exigir lo mismo que al resto para aprobar el curso.
El Preámbulo de la Convención de los Derechos de la Infancia recuerda que “la Declaración Universal de Derechos Humanos las Naciones Unidas proclamaron que la infancia tiene derecho a cuidados y asistencia especiales”. Y en el Artículo 3 de dicha Convención se afirma que:
- En todas las medidas concernientes a los niños que tomen las instituciones públicas o privadas de bienestar social, los tribunales, las autoridades administrativas o los órganos legislativos, habrá una consideración primordial a que se atenderá el interés superior del niño.
- Los Estados Partes se comprometen a asegurar al niño la protección y el cuidado que sean necesarios para su bienestar, teniendo en cuenta los derechos y deberes de sus padres, tutores u otras personas responsables de él ante la ley y, con ese fin, tomarán todas las medidas legislativas y administrativas adecuadas.
En ese contexto, y con esa declaración de principios por delante, hay gente que aún opta por encarar la realidad desde la visión criminalizadora y culpabilizadora, que neutraliza la dignidad de los otros simplemente por el hecho de ser pobres -claro ejemplo de la “aporofobia” acuñada por Adela Cortina- o bien, desde el enfoque de Derechos y la defensa de los mismos que, en el caso que nos ocupa, adquieren una crudeza aún peor ya que nos referimos a los Derechos de la Infancia, uno de los colectivos más frágiles y vulnerables de nuestro mundo.
Por eso, desde el Grupo de Infancia de Por Un Mundo Más Justo instamos a cuantos tengan parte (Gobierno, Comunidad Autónoma, Ayuntamientos, partidos políticos, asociaciones y grupos vecinales, organizaciones sociales, medios de comunicación, ciudadanos… ) en la solución de la problemática que viven todos los niños y niñas de Cañada Real, que tomen medidas de carácter urgente para protegerlos de lo que, de lo contrario, será motivo de una mayor profundización en su riesgo de exclusión. De modo particular invitamos a que dentro del PACTO REGIONAL POR LA CAÑADA REAL GALIANA firmado en 2017 (https://www.comunidad.madrid/servicios/urbanismo-medio-ambiente/pacto-regional-canada-real-galiana) se incluya un apartado explícitamente destinado a la protección de la infancia y la promoción de la misma.
En nuestro Partido somos conscientes de que no existen soluciones fáciles y huimos de planteamientos simplistas. Pero también de que, la aminoración de las consecuencias de la pobreza o el camino hacia la erradicación de las causas que la producen, en gran medida es cuestión de voluntad política. Y apostamos por ello. Mucho más allá de intereses electoralistas o conveniencias según el momento.
Trabajemos por que todos los niños y niñas crezcan con las mismas oportunidades. Será la mejor manera de construir un mundo más justo.
Grupo de Infancia de Por Un Mundo Más Justo