Por un diseño de distritos municipales radiales. Porque sin equidad en los barrios no hay justicia.
En estos días muchos vecinos y vecinas de varios barrios periféricos de Sevilla están llevando a cabo movilizaciones -encierros, manifestaciones- contra los cortes de luz que están sufriendo de forma sistemática (entre estos barrios que sufren los cortes están Su Eminencia, Padre Pío, Palmete, Polígono Sur, Torreblanca…)
En este comunicado de la APDHA -la Asociación Pro Derechos Humanos de Andalucía- se puede leer una descripción de lo que está pasando y las reivindicaciones más importantes. En él se lee, entre otras cosas que “la electricidad es un servicio vital imprescindible para la vida digna y los cortes suponen una vulneración constante y sistemática de los derechos humanos. Si Endesa no es capaz de resolver de forma inmediata el problema, entendemos que éste pasa a ser responsabilidad de la administración pública que deberá de tomar riendas en el asunto haciéndose cargo de la gestión de la distribución de energía eléctrica expropiando esa filial de Endesa o aplicando alguna medida similar”.
Una situación que, en definitiva, es consecuencia del abandono histórico -para muchos algo interesado e intencionado- de los barrios vulnerables. Un ejemplo de ello lo describen desde la plataforma Barrios Hartos de Sevilla -que están impulsando las movilizaciones- en este post (además, al final de este posicionamiento podéis escuchar una entrevista a Juan García, portavoz de dicha plataforma, en la emisora Radiópolis). Este abandono evidencia el grado de deshumanización que sufren muchos distritos en nuestras ciudades (de ello ya nos hemos hecho eco más de una vez, como en este posicionamiento de hace dos años por la situación en La Cañada Real Galiana de Madrid) y tras el que pudimos contar con la presencia de uno de los “referentes naturales” de aquel barrio, Agustín Rodríguez del Teso, en uno de nuestros Foros Juan Burgos.
Todo esto perpetúa la constatación de que, en nuestra sociedad, existen ciudadanos/as de primera y ciudadanos/as de segunda (o de tercera, o cuarta…). Lo que acontece con los cortes de luz en los barrios de Sevilla, de Granada, de Madrid… o tantos otros lo deja claro: de ocurrir sucesos parecidos en distritos o barriadas más céntricas las soluciones no se hubiesen hecho esperar. Pero, en cambio, los/las vecinos/as de los barrios vulnerabilizados de la periferia, sufren la estigmatización, el olvido o el descarte. Es cierto que en muchos de ellos se dan problemáticas profundas, como la de los enganches ilegales para el cultivo de marihuana, pero ni eso puede anteponerse a que están pagando por ello e injustificadamente ciudadanos que abonan sus impuestos y sus recibos de luz. Es parte del drama de nuestro mundo, que a menudo mira a las personas según “sus cuentas corrientes” en los bancos, su lugar de nacimiento, su color de piel o muchas otras características circunstanciales. En ese sentido, la ONU alertaba apenas hace un par de meses del incremento exponencial de la desigualdad dentro de las ciudades
Con todo ello, desde M+J, además de dar voz a las exigencias -a estas alturas, cuando la situación ya juega con la vida y la salud de las personas, no pueden ser “simples” peticiones- de las asociaciones y barrios (la imposición de multas a Endesa o la retirada de los contratos públicos con dicha entidad, o incluso el planteamiento de su posible renacionalización para no estar en una cuestión tan esencial como es el suministro eléctrico al albur de multinacionales y empresas que solo piensan en los beneficios económicos; la movilización de Junta y Ayuntamientos para dar solución de emergencia a las víctimas de los cortes -máxime en el contexto de temperaturas extremas como estamos viviendo-; soluciones estructurales para garantizar el suministro a los clientes que pagan sus impuestos, etc) vemos también necesario caminar con esta doble perspectiva:
- Creación de una gran plataforma que aglutine a todos los barrios de ciudades españolas que experimentan vulneraciones de derechos semejantes -en esa dirección va la propuesta que hacen desde Granada el Defensor de la Ciudadanía -Manuel Martín – y la presidenta de la Asociación de Vecinos Nueva Cartuja -Rosa García-.
- Dar pasos para que los distritos municipales se transformen en “distritos radiales” frente al sistema de “distritos coronas”. Entendemos aquí por “distritos radiales” aquellos que dividen a un municipio en territorios semejantes a segmentos o “quesitos”, de tal manera que todos nacen en una zona céntrica de la ciudad y se extienden -en forma de triángulo más o menos regular- hacia las afueras, y por “distritos de corona” aquellos en los que hay alguno/s que ocupa/n todo el centro geográfico de las urbes y el resto aglutinan barrios en conjuntos cada vez más alejados de dicho centro. Los “radiales”, obligarían a que toda la población fuese tratada en igualdad de derechos y oportunidades, mientras que los de “corona” provocan, en líneas generales -y excluyendo las urbanizaciones más pudientes que también se crean en los exteriores de las ciudades-, un progresivo deterioro de las condiciones de vida y el tejido social conforme más se alejan los distritos del centro, traduciéndose, a la postre, en un mayor agravamiento de las diferencias y vulneración de derechos para aquellos que se encuentran en las “coronas” más alejadas del centro, como es el caso de los barrios comentados en este posicionamiento. Optar por “distritos radiales” es evolucionar para que en el tratamiento de las problemáticas y desafíos ciudadanos participemos todos/as en igualdad de condiciones, incentivando la solidaridad y la fraternidad y favoreciendo la integración entre diferentes sectores socioeconómicos frente a la segregación actual, como bien saben los habitantes de las barriadas sevillanas que estos días protagonizan los encierros por los cortes de luz.
(El proceso al que hacemos referencia en la organización de los distritos es el inverso al que se ha vivido en grandes ciudades como Madrid, y que, como es fácil constatar, genera desintegración y desigualdad)
En M+J, dentro de cuya afiliación hay buen número de personas que viven o trabajan en los barrios de los que aquí tratamos, -incluso en los que son protagonistas de las acciones de estos días-, nos caracterizamos por una clara convicción: ser convencidos creyentes de que otro mundo más justo y fraterno es posible. Si bien, lejos de la ingenuidad, somos conscientes de la complejidad de los pasos necesarios para llegar a conseguirlo. Por eso, seguimos apostando por los pequeños avances, concretos y que repercuten directamente en la mejora de las condiciones de vida de las personas más frágiles. La crisis de los cortes de luz son una oportunidad exclusiva para ello. No la desaprovechemos.
Equipo de Barrios Periféricos de M+J
Este artículo hace alusión a una entrevista en radio que aquí compartimos: